22/7/09

Vicios

Oh, vicios, malditos vicios.
Todo empieza con una pequeña probadita, solo un vistazo para ver de qué va el tema, y cuando te quieres dar cuenta estás completa e irremediablemente enganchada.
De pronto te ves inmersa, abducida a otro mundo del que no puedes salir... del que no quieres salir. De pronto un pequeño vistazo diario no es suficiente, quieres más, necesitas más.
A veces vienen y van. A veces, cuando todo termina lo vas superando lentamente, poco a poco sales de agujero y te das cuenta del enganche que tenías. A veces te das cuenta pero simplemente no te importa, quieres veri, vivir mucho más. Unas pocas, ni siquiera te das cuenta.

Oh, vicios, malditos vicios.
A mí, normalmente me vienen pequeñas obsesiones temporales. Y sí, normalmente me llegan en épocas de mucho estrés y exámenes. Es extraño pero cierto, todo parece preparado de antemano. Según se acerca una semana dura, unos exámenes finales o simplemente se me acumula el trabajo, empiezo a preguntarme cual será mi nueva perdición.
¿Un libro de mil páginas que leer en dos horas?
¿Una serie con veinte temporadas que ver en dos noches?
¿Un manga de tropecientos capítulos con los que ponerme al día en un rato?

Sí, mis vicios pueden parecer poca cosa.
Muchos dirán Bah, eso no es un vicio, no es una droga que te mantenga enganchado, que te encadene y te impida dejarlo, que doblegue tu voluntad y nuble tu mente hasta que no puedes pensar en otra cosa.
Y yo les responderé ¿Lo habéis probado?

Porque al menos sobre mí si tienen ese efecto. Si un libro cae en mis manos sé que no podré cerrarlo hasta llegar al final y que, incluso cuando termine de leer, querré más, mucho más. Sé que si una nueva temporada de alguna serie maravillosa llega hasta mi ordenador, mi culo no se depegará de mi silla hasta ver pasar el último título y que después, tiempo después, seguiré pensando en ella.

Tal vez mis vicios se llamen Canción de Hielo y Fuego, La Espada del Inmortal, Queer as Folk o Kingdom Hearts, pero son tan dañinos como cualquier otro.
¿Y lo mejor de todo ello? Que los sigo amando a todos y cada uno de ellos.

Oh, vicios, malditos vicios... cuánto bien me han hecho.

3 comentarios:

Sarah dijo...

Razon tienes.
Pues fijate, justo hoy estaba pensando hacerca de que yo no estoy obsesionada por nada en concreto. No me gusta nada tanto como para vivir por y por ello. Me parece muy triste la verdad.
Tu blog va acorde con mis pensamientos.
te quiero!

sarah dijo...

Lo siento pero me habia equivocado en el acerca. Y lo habia puesto con H. Perdoname es tarde. Aceptare tu pertinente castigo.

Mew dijo...

Vicios... de eso sabemos tu y yo un rato ¿eh? xD
Pero tienes razon tia, son vicios que en el fondo queremos que sigan siendo asi... no te veo renunciando a Hishi-chan (ni a mi a Kandy-Kandy)(duele... escribrir... ese nombre... tan horrible) lol!
Juas juas, pues nada mujer que el domingo volveré a Madrid, así que si me haces un huequito entre semana podemos ir a mirar lo de la goma EVA.

Besos guapa!