5/9/10

Si solo pasase en verano...

No deja de sorprenderme la capacidad que tiene el ser humano de maltratar a otros seres. Podemos dar cantidades ingentes de cariño, amor, ternura y atención; pero nuesra indiferencia y desprecio, nuestra crueldad, no tienen límites.

Soy incapaz de creer que alguien pueda matar a un animal que le mira expectante y se acerca tímidamente a él.
Cuando nicholina me contaba que su vecina la había animado a matar a los gatitos de apenas unos meses que han encontrado refugio en su parcela este verano, sencillamente, no me lo podía creer. Algunos de los gatitos ni siquiera tienen pelaje todavía, conservan esa suave pelusilla con la que nacieron, y todos tienen unos enormes ojos brillantes, desproporcionados con el resto de su enclenque cuerpecito, que inspiran una ternura infinita. Son unos gatitos que han aprendido a refugiarse de la lluvia en el porche de nicholina y a acudir fielmente a su puerta todos los días, esperando algo para comer.




Al principio del verano acababan de nacer, eran pequeños y huesudos, huidizos y algo ariscos. Ahora, que acabo de pasar unos días con mi amiga, son unos gatitos que se acercan a ti y ronronean cuando juegas con ellos, maullan desconsolados cuando cierras la puerta por las noche dejándoles a ellos fuera y comen de tu mano sin temor. Todos ellos tienen un nombre.
Jack es el más confiado, el que se restriega contra tus piernas sin temor; Shiva la más desconfiada, que no se acerca nada más que para comer. Dos Caras tiene una graciosa mancha blanca en la cara que parece una máscara; Pelusa es el más pequeñito, el último en nacer, el que se acurruca en cualquier rincón;... Y así podemos seguir hasta nueve, porque el décimo ya ha muerto. La madre se llama Princesa y el padre Rayo. ¿Veis? Son una pequeña familia como otra cualquiera.

Y lo único que me duele al pensar en ellos es que, después de estos meses de juegos y buena alimentación, cuando nicholina vuelva a Madrid, quedarán a merced de una mujer que es capaz de decir con alegría "si les cortas el cuello y los echas al contenedor nadie se va a enterar".


Tampoco puedo entender cómo se puede abandonar a su suerte a un animal con el que se ha vivido un día tras otro y que acude a tí buscando cariño. Pero hay gente que lo hace, MUCHA gente. Sin duda, demasiada gente.... Sí, incluso una sola persona sería demasiada.

En verano cientos de personas abandonan a sus animales por la sencilla razón de que son un engorro para viajar. Animales que mueren atropellados y abandonados; animales por los que, muchas de las veces, se ha pagado una verdadera millonada. Ahora estas palabras las tenemos todavía recientes, durante el verano hay muchas, o al menos alguna, campaña contra el abandono animal; pero aunque solo nos acordemos cuando estamos de vacaciones, no es un fenómeno veraniego. Ojalá lo fuera.

Hace un par de semanas encontramos, mientras paseábamos con los perrilllos, un precioso Alaska abandonado en mitad del campo. Nos acompañó hasta casa y se negaba a marcharse con la gente de la perrera. Lluvia, ahora una alegre perrita que vive en mi casa, se ha pasado todo el invierno vagando por las calles, y todos mis vecinos la han dado de comer o la han acogido en su casa al menos una vez.

No tiene sentido, de verdad lo digo. Seguramente no todos tengan un familiar o un amigo con el que dajar a los animales unas semanas o unos meses, y sin duda, muchos no podrán permitirse dejarlos en un hotel para mascotas. Pero lo que tampoco dudo, es que todo el mundo puede contactar con alguna asociación o centro de acogida donde vayan a estar cuidados y más seguros que en mitad de la carretera. Hay muchas, unas más conocidas que otras, pero todas mucho mejores que una gasolinera. Sin salir de Madrid, podéis encontrar, por ejemplo, el CIAAM o El Refugio.


Dos de mis perros, Rocky y Summer, están en casa porque distintos amigos se ha ido a vivir fuera de España y necesitaban un nuevo hogar. Mandala llegó desde El Refugio y Lluvia viene directamente de la calle. Siempre hay alguna opción y yo puedo aseguraros que jamás, jamás, les dejaría de lado. Sencillamente no podría.


Y aunque esta entrada tenía intención de ser una presentación bloguera de mis nuevas niñas, Lluvia y Summer, creo que me he extendido suficiente por hoy.
¡Hasta la próxima entrada perruna!





[EDIT] Cambio un par de imágenes y el nombre de la gata para que nicholina no me linche, ahora sí que son de sus gatitos y las fotos son mucho más mosnosas que las que había xD [/EDIT]

5 comentarios:

Sarah dijo...

Cada vez tengo más ganas de conocerlos. Subiré a tu casa, lo prometo, aunque sea la última cosa que haga en mi vida. Tienes mucha razón y haces muy bien en cuidar a estos perritos, eres estupenda!

Un besito!

Mew dijo...

Yo tampoco lo entiendo. Más que nada porque cada vez que salgo de casa echo muchísimo de menos a Shinet, y no soy capaz de imaginar a alguien que quiera deshacerse del animal con el que ha estado conviviendo, sea el tiempo que sea.

Una vez más todo se reduce a la lealtad y a quién seas capaz de traicionar y dar la espalda. Yo, desde luego, no lo haría.

Nicholina ^^ dijo...

A ver que te voy a decir unas cosas: .1a la gata se llama Sofia, princesa es su antecesora. 2a ahora se dejan coger todos ^^. 3a me has pintado muy mal, yo no puedo traerme a 10 gatos a mi minusculo piso por muy adorables o fantasticos que sean además de que no los abandono porque el vecino de arriba del todo también les da de comer. Sabes que yo soy la primera que odia el maltrato animal y yo no los abandono sencillamente porque no son mios. Por lo demás me parece muy bien que hagas esta denuncia (espero que no sea x mi) a ver si la gente entra en razón.
Un beso

Nicholina ^^ dijo...

por cierto, aunque la foto de los gatos que has puesto es adorable, podrias haberme pedido alguna foto porque tengo un reportaje entero :)

Niwa dijo...

Bien, vayamos por partes, pues.
Lamento el pequeño desliz con el nombre de la gata y si no he puesto una foto suya de verdad ni sabia que ya se habian convertido todos en unos dulces y melosos mininos es porque estás incomunicada en el pueblo. Así que no te preocupes, pásame fotos azucarosas de tus gatitos y las cambiaré en seguida ^^

Por otro lado, no pretendía para nada ponerte mal. Todo lo contrario. Eres tú la que los ha acogido y les ha dado de comer mientras crecían y se hacían fuertes para poder sobrevivir sin problemas. Tampoco sabía que tenías un vecino con corazón, porque hasta donde llega mi conocimiento, uno de ellos tiene encerrados a sus perros en jaulas de menos de un metro cuadrado y no los limpia, ni los cepilla, ni los saca, y la otra es una perra que quiere pasar a cuchillo a los gatitos. Así que te aseguro que a quien pretendía hacer sentir mal no era para nada a ti, que recoges todo animal herido que encuentras y lo acoges en tu casa hasta que se va por su propio pie; si no a la gente que como tus vecinos, no tienen ni una pizca de empatía o corazón hacia los animales y los abandona, los maltrata o directamente los mata.